sábado, 31 de agosto de 2013

Elecciones.

"No podemos volver atrás, por eso cuesta tanto elegir. Mientras no elijas, todo sigue siento posible" Las vidas posibles de Mr.Nobody

Pero, ¿qué es la vida sino una encrucijada de decisiones? Poco a poco, minuto tras minuto, vamos formando nuestra vida, tejiéndola, con cada decisión que tomamos, por insignificante que parezca.
Unas decisiones parecen tener vuelta atrás, otras no. Sin embargo aunque intentemos volver atrás, y lo consigamos, esa decisión ya habrá hecho su pequeño nudo en nuestra vida, imposible de deshacer.

"¿Alguna vez habrás tenido que tomar esta decisión, no? Entonces me comprendes"

Lo cierto es que no, tiendo a equivocarme en mis actos porque nunca estoy segura de lo que prefiero elegir. Simplemente me dejo llevar porque, todas las decisiones son un error y un acierto a la vez. Pero eso da igual porque nunca sabremos como serían las cosas de haber tomado otro camino. 
Esa incertidumbre es la que me bloquea.
Pero una decisión a tiempo puede librarte de mucho.

Una vez me contaron, que la vida es como un juego de cartas, algunas puedes elegirlas sobre la marcha, pero la mayoría de ellas no puedes elegirlas porque ya venían contigo, pueden gustarte o no, pero ahí están.

Lo que te define al fin y al cabo, no son las cartas que tienes, es la manera en que las utilices. Cuál será tu jugada, la jugada de tu vida.
Muchas veces es más sencillo no apostar.



miércoles, 28 de agosto de 2013

¿Por qué a menudo vemos belleza en la tristeza?

Se que es engañarme. Es mentirme.
Es mentir a los demás, cada vez que sonrío mientras todo se derrumba en mi interior.
Tengo una forma curiosa de afrontar las cosas, engañarme hasta el punto de que cuando sea consciente de mi propio engaño ya sea demasiado tarde para solucionarlo. Espero.
Es mi manera de huir, de esquivar las decisiones, las elecciones.
Siempre hay algo de lo que arrepentirse, siempre hay un error por cada decisión.
No pensar, ponerme un velo tras otro para no poder ver lo que realmente siento. No lo se ni yo.

Me necesito, te necesito, pero ni estoy ni estás, ambos desaparecimos hace mucho tiempo.
Ahora grito en silencio no se muy bien a qué ni a quién, es extraño, siempre me equivoco.
Duele echar de menos tantas cosas.

Ya no arriesgo por nada,
ya no arriesgo por nadie,
pero esto no fue culpa mía. Venía en el lote.
Antes no era así, antes me movían los sentimientos más que a nada, joder si crees en ello persiguelo hasta conseguirlo, da igual todo lo demás, da igual si no lo consigues al final.
Si creía en algo lo perseguía con los ojos cerrados por mucho que me estrellara, porque esa esperanza me mantenía despierta. Creía en mí y no necesitaba más.
Y ahora mírame, no creo en nada, ni siquiera en mí misma.
Creo en el fracaso y la impermanencia.
Todo termina y nadie permanecerá a tu lado por siempre. Nadie.

Antes mis ojos brillaban con la ilusión de la niña que era.
Es confuso, cuando me encuentro cara a cara conmigo misma y no se como reaccionar. Me asusta.
Sigo teniendo un miedo atroz a la soledad.


jueves, 1 de agosto de 2013

10 días. Y que pare el tiempo en un instante eterno.



Por primera vez en mucho tiempo he vuelto a desear que realmente se parase el tiempo.
Y eso se lo tengo que agradecer a todas las personas y personitas con las que he compartido estos 10 días tan increíbles, en los que he aprendido un montón de cosas, como monitora y como persona.

Recuerdo el primer día en el bus, con miedo hasta de los niños, sintiéndome como la más niña de todos y preguntándome si sería capaz de hacerlo bien.
Lo cierto es que los primeros días fueron algo extraños, pero desde el primer momento ese fantástico grupo de monitores nos trato como si siempre hubiéramos formado parte de él y esa calidez y confianza se notan mucho y marcaron una gran diferencia.
Conforme han ido pasando los días hemos cambiado mucho e inevitablemente también fuimos cogiendo cariño a todos los que estaban conviviendo con nosotras.

A los monitores, agradecer ese apoyo y confianza que, sin tener por que, depositaron en nosotras, esas noches de risas juegos y bromas, a más de uno se le ha puesto morenito el culo en estos días. Y esas charlas (especialmente con dos de ellos) que tanto me han hecho pensar y descubrir cosas que antes ni siquiera era capaz de ver.
Sin Fanny, mi compi de prácticas tampoco habría sido lo mismo (porque todas las "novatadas" habrían sido dirigidas hacia mí...) no se como me habría ido sin tener una pequeña confidente que me ayudara y comprendiera en todo momento... Las risas que nos hemos echado juntas estos días no han sido pocas, me alegro de que fueras tú.
Gracias a todos por enseñarnos tanto.

A los pequeñajos bueno, simplemente cada uno de ellos es más increíble que el anterior, también he aprendido muchísimo de ellos y recordado otras tantas cosas que creía olvidadas, pienso que es importante no alejarse demasiado de los niños, pues poco a poco se acaba apagando una parte muy importante de uno mismo que luego es difícil de recuperar. Si bien es cierto que muchos de ellos acabaron con nuestra paciencia, no hay nada que no se pueda arreglar cuando te miran con esa sonrisa que les ilumina la cara, les voy a echar muchísimo de menos, a todos ellos. Cada uno tenía algo diferente que le hacía único y especial.
Y más en concreto a los Monsterjeans que fue el grupo con el que más tiempo estuve, a ellos y a su teacher, la mejor lección que me llevo de los monitores es la de disfrutar como el que más haciendo su trabajo.

Que son muchos días, conviviendo en nuestra propia burbuja apartada de todo con gente que no conoces de nada y que se acaba convirtiendo, quieras o no, en tu pequeña gran familia temporal... Echaré de menos las buenas noches, los abrazos mañaneros, las putadas, las siestas y cafés, las risas y sonrisas a cada instante, las conversaciones tan profundas... Todo.
El ser feliz con tan poco.
Y hay más de un niño y niña del que me voy enamorada.
No se si habré aprendido todo lo que podía llegar a aprender, pero desde luego he aprendido mucho más de lo que esperaba que iba a aprender en un sitio así.
Una vez más, muchísimas gracias. Me alegro de haber tenido la oportunidad de conoceros.



Y espero volver a veros.

lunes, 11 de marzo de 2013

Por ti, he dejado de ser yo.

Algo que tú nunca entenderás, al igual que el resto de personas "que no respetan la libertad de los demás" cuando se consideran con el derecho suficiente para ello es que seguramente ninguno de ellos quiso llegar a golpear a su pareja y ni otras cosas...
-Eso yo nunca lo haría intencionadamente
Y yo me lo creo. Pero el problema no es ese, el problema es que llegues a tener un comportamiento tan agresivo con esa persona tan a menudo ya que es algo que, aunque tú lo consideres normal, no lo es. Al igual que insultarla de la manera en que tú has hecho, por mucho que consideres que lo merece, que es culpa suya o que lo ha provocado... Tampoco es normal.
Nunca hay suficientes motivos para que ninguna de estas dos cosas estén justificadas. Jamás.
Para mí tampoco es normal ni está justificado el hecho de perseguir a esa persona, agarrarla o impedirle el paso, ni controlarla hasta el punto de entrometerte en su intimidad, prohibirla hacer ciertas cosas o obligarla a sacar de su vida a algunas personas, ni dejarla en evidencia delante de tus amigos.
Pero desgraciadamente esto sí que es normal y justo en muchas parejas hoy en día, por lo que no me voy a meter en ello.
No puedes tratar así a nadie, nunca, bajo ningún concepto, ni siquiera aunque sea esa persona la que te lo permite; en especial si es así.
Porque es totalmente contradictorio que digas:
- Te quiero con locura, más de lo que nunca había llegado a querer a nadie.
Y luego machaques a esa persona hasta conseguir apagar esa "luz" interior que brillaba en ella, que la caracterizaba, solo para conseguir tus propios intereses. Porque por mucho que se diga que es por la relación, someter a esa persona hasta esos límites (aunque tú tampoco hayas sido mejor que ella cometiendo errores) solo para que tú puedas estar bien a sabiendas de que esa persona está sufriendo... Es preocuparte por tus propios intereses.
Eso no es amor. Eso es un vicio, una obsesión y un gran error.
No dudo que me quisieras en su momento, que de verdad tuvieras ilusión en esto ni que me hicieras feliz, muy feliz... Joder, ambos la teníamos y estábamos contentos juntos, nos queríamos muchísimo... Incluso podría atreverme a decir que nos amábamos.
Pero hubo un momento en el que tu inseguridad y mi forma de ser transformaron eso tan bonito en algo fatal, en una relación totalmente cancerígena, si es que podía seguir llamándose relación.

Que, lo creas o no, te quiero como hacía mucho que no quería a nadie y como nunca pensé que podría llegar a quererte...
Por ti, he llegado a perderme a mí misma, he llegado a sentirme culpable por estar contenta cuando no estás a mi lado, he llegado a ser como tú querías que fuera y a ceder en muchas de tus presiones e incluso a perder a varias personas realmente esenciales en mi vida...
Por ti, he dejado de ser yo.
Para convertirme en algo horrible, en aquello que siempre he odiado... Que cuando estoy a tu lado me convierto en algo que realmente aborrezco, en ese tipo de persona que siempre he querido tener lejos. Y se que tú tampoco has salido mucho menos perjudicado de esto...
Me cuesta tomar una decisión tanto que nadie se hace una idea siempre he sido así, respecto a todo... Porque no aprendo ni a palos y olvido todo lo malo recordando siempre lo bueno y dejándome llevar por lo que siento, cuando debería ser:
Recordar lo bueno y olvidar lo malo, pero nunca a los que fueron malos.
Tanto para mí como para ti.
Por lo que esta actualización es en parte para recordarme que esto es la decisión definitiva (que de hecho has tomado tú en un principio) pero esta vez no te voy a permitir echarte atrás ni voy a suplicarte que "me" des otra oportunidad... Se que nos va a costar demasiado, por lo menos a mí, pero te prometo que voy a ayudarte con todas mis fuerzas a que esto sea el final, un punto y final.
Y no un punto y aparte.


Te quiero y ya te echo de menos, pero esto nos estaba destrozando... Lo siento.
Espero, sinceramente, que algún día nuestras vidas se vuelvan a cruzar.

viernes, 4 de enero de 2013

Resistir

Solo hasta que tú dejes de insistir.

No puede ser difícil.
Luego me podré rendir,
y algún día volver a resurgir.